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Sara Pérez afronta su primera temporada como profesional con ilusión y responsabilidad

La triatleta lleva varias semanas en la isla preparando sus objetivos del año

  • Gradacero.es
  • Imagen: @pello.o
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    La triatleta Sara Pérez sigue quemando etapas para entrar en la élite mundial de triatletas. Así es como ha llegado la gran noticia que daba a conocer hace unos meses: A partir de 2023 será deportista profesional, por lo que podremos disfrutar de todo el potencial que la catalana ha ido desplegando a lo largo de su trayectoria. Motivo por el que ha querido contar en GradaCero cómo ha vivido un cambio de tanto calado, además de adelantarnos los objetivos marcados para esta temporada.
     
    "Podría decir que me ha cambiado la vida, porque hasta ahora sobrevivía con lo poco que me daba el deporte", afirma Pérez Sala al mismo tiempo que señala como punto de inflexión los grandes resultados con los que comenzaron a llegar las posibilidades de optar a mayores premios y a sponsors de mayor calado.
     
    Fue desde el año pasado cuando la campeona del Mundo de Triatlón de Media Distancia comenzó a surgirle en la cabeza la posibilidad de dedicarse profesionalmente a su pasión, debido a que su participación en diferentes eventos le hacía tener que ausentarse de sus obligaciones laborales en algunas ocasiones. "Creía que lo mejor era dejar el trabajo a un lado. Hablé con todos mis clientes y lo entendieron perfectamente, diciéndome que ya se lo esperaban. Creo que también es bueno, hacia las marcas que apuestan por mí, dedicarme únicamente al deporte", comenta Sara sobre esa puerta hacia la profesionalidad en el triatlón que se le abrió después de la gesta lograda en el Challenge Miami de 2021 (ahora denominado CLASH Endurance Miami), en la que terminaría en cuarta posición, a solo seis segundos del pódium en un debut en competición de ensueño.
     
    Pérez admite estar "muy ilusionada", pero también "con ciertos miedos como lesionarme o que algo salga mal". Aunque como admite la propia catalana, las circunstancias actuales en el triatlón y la configuración de la PTO (Organización de Triatletas Profesionales) juegan a favor de la decisión que ha tomado, ya que ahora existe un mayor apoyo para que los triatletas puedan vivir de su deporte. "El sistema de puntuación mediante ranking facilitó mucho poder tomar esta decisión. Es verdad que se beneficia mucho económicamente a los 20 primeros, pero es una clasificación que llega a los 100 participantes en los que todos reciben una ayuda económica", nos explica la catalana, "además tienen sus propias carreras en las que entran los 40 mejores, así que está el hecho de que tienes posibilidad de poder luchar por acceder a sus carreras, en las que también recibes apoyo económico solo por completarlas".
     
     
    Ya hay menos pruebas en las que la mera competición suponga una pérdida de dinero para el triatleta, por lo que este sistema da oxígeno al deportista. "Este año hay al menos tres carreras de este tipo que te permiten ser profesional", puntualiza la triatleta asidua a Lanzarote, "creo que ya era hora que los triatletas puedan ganar dinero con este deporte, es algo que pasa bastante en muchas disciplinas". Lo vivió también así en su etapa de natación, en donde llegó a ser séptima en los JJOO de Atenas 2004, "los políticos deportivos viven como Dios y el deportista se va de viaje, prácticamente con una mano delante y otra detrás", señala. 
     
    En cuanto a los grandes cambios que han supuesto el salto a ser profesional, Pérez admite que "conscientemente intento afrontar las competiciones de la misma manera que antes, pero subconsciente sí que es verdad que noto que tengo una responsabilidad. Es algo que trabajo con la psicóloga porque quiero hacerlo bien y quiero seguir disfrutando del deporte. No quiero que una mala carrera me condicione."
     
    No pasa lo mismo con los entrenamientos, que sigue cumpliendo a rajatabla y en los que mantiene el mismo nivel de motivación que tenía antes de ser profesional. "Soy muy cuadriculada. Sé que, para llegar a un resultado, hay consecuencias: hay que entrenar duro, no te puedes saltar nada, hay que ser disciplinado...  Todo eso siempre lo he seguido haciendo, aunque es verdad que quizá, con el trabajo, alguna vez he tenido que cancelar o posponer alguna sesión de entrenamiento".
     
    Precisamente esa es una de las caras positivas de su cambio de vida, ya que ahora puede dedicar tiempo al descanso y la recuperación, parte también de vital importancia para los atletas. "Ahora no tengo ese nivel de fatiga, con lo cual no hace falta que me salte nada a no ser que haya alguna molestia, pero la mentalidad es la misma", afirma Pérez quien a pesar de tenerlo presente, no teme a las posibles lesiones. "Forma parte del juego", afirma con optimismo y conocedora de lo que supone su nueva etapa profesional. "A mí me ha pasado e intentas tomártelo de la mejor manera posible. Al día siguiente te levantas con una sonrisa y tienes que volver a estar motivada con lo que quede por delante, en lugar de amargarse por lo que haya podido salir mal".
     
    Además, señala que incluso ahora, como profesional, valorar más la victoria: "A final este tipo de vida tiene muchas más ventajas que de desventajas. Creo que a cualquier persona que se lo plantees, querría dedicarse profesionalmente a su hobby. Es una decisión fácil".
     
    Esa profesionalidad no solo se ve reflejada en Sara Pérez porque ahora luzca más firmas en su equipación, sino también en las nuevas metodologías de trabajo. La triatleta viajó recientemente con su entrenador para hacer pruebas en el túnel del viento de la Universidad Tecnológica de Eindhoven de cara a la nueva temporada. "Dedicamos muchísimas horas de entrenamiento para mejorar, para ir más deprisa", admite Pérez que también dedican tiempo a todos aquellos factores externos que ayudan a mejorar los registro en la competición, como ha sido su cita a la ciudad neerlandesa. "Me gusta invertir en este tipo de cosas para ser lo más eficiente posible. Tengo la suerte de que mi entrenador, Jaime, es un gran biomecánico que ha ido muchas veces al túnel y con el que creo que hago un buen equipo", detalla la catalana.
     
     
    Pérez Sala arrancará la temporada en Lanzarote, con el Volcano Triathlon que se celebrará el próximo 25 de febrero y en la que también estará Lucy Charles. "Me gusta que la primera competición sea con gente con muy buen nivel mundial. Creo que es un plus que te hace que arranques mucho más motivado, que estés más concentrado en hacerlo todo bien y no cometer fallos", declara la triatleta de un evento que "sobre todo es un buen test para las siguientes pruebas. Aprovechas que es una buena carrera con buenas condiciones meteorológicas en las fechas en las que estamos. Es una buena oportunidad para una preparación de calidad y ver cómo estás de forma".
     
    En cuanto a otras citas importantes para este 2023, Pérez confirma que estará en el CLASH Endurance Miami (antes denominado Challenge Miami). "Creo que por fechas no llegaré al 100%, pero sí al 90%. Es una carrera que me gustaría ganar alguna vez en mi vida, si es esta vez mejor", comenta Sara mientras ríe, "es una carrera que me hace mucha ilusión y que me encanta".
     
    El calendario deportivo de la Sara Pérez profesional aún tiene por cerrar algunos detalles y es que se espera que pueda estar en alguna de las carreras de la PTO, como la de Milwaukee o Singapur (ambas en agosto), o la que se celebrará en mayo en una localidad europea aún por anunciar. Pérez tampoco faltará al Campeonato del Mundo de Challenge de Sanmorin previsto para mayo, e incluso no cierra puertas a otro Challenge en junio. Lo que está claro es que a Sara Pérez solo le faltaba dar el salto para que el mundo del deporte pueda disfrutar de una atleta que promete grandes éxitos.
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