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"Eres mi mejor medicina": Hecher Sosa noquea y emociona en la noche de los Campeones

El luchador lanzaroteño ganó por KO y le dedicó el cinturón a su padre entre lágrimas

  • Gradacero.es
  • Imagen: wowfc
  • Hecher Sosa no solo peleaba por un cinturón. Peleaba por su isla, por su familia y por su historia. El luchador lanzaroteño, conocido como El Guanche Warrior, protagonizó una actuación memorable en La Noche de los Campeones, celebrada en el Madrid Arena, donde se proclamó nuevo monarca del peso gallo de WOW Fighting Championship tras noquear en 50 segundos a Yaman Mhajed, la gran promesa de las artes marciales mixtas en España.

    La pelea comenzó con una poderosa derecha a la sien del vasco, que intentó sin éxito llevar el combate al suelo. La defensa firme de Sosa y un rodillazo cerca de la reja marcaron el tono de un duelo cargado de intensidad. Con cada golpe, el lanzaroteño descargaba una mezcla de rabia, concentración y necesidad emocional. Un codazo fulminante sobre el rostro de Mhajed terminó por mandar al suelo a su rival y forzó al árbitro a detener el combate ante la evidente superioridad del canario.

    "Vine a romper a mi rival. Se lo dije en la rueda de prensa y durante la preparación. Lo iba a partir, y así fue", afirmó Sosa al término del combate. Pero su mensaje más profundo no fue sobre la victoria deportiva. Fue sobre lo personal: “Estoy muy contento de haber cumplido lo que más anhelaba: ponerle el cinturón a mi padre en la última pelea que va a ver conmigo, seguramente. Es muy emotivo. Hace diez meses falleció mi hermana, y ahora estamos perdiendo a mi padre. Es muy duro, pero este recuerdo quedará conmigo para siempre”.

    La escena fue tan simbólica como poderosa. Sosa colgó el cinturón de campeón en el hombro de su padre, presente en el recinto. Un momento que el luchador llevaba tiempo preparando: no peleaba por títulos, peleaba por rendir homenaje a su mayor referente. Su padre, emocionado, solo pudo decir unas palabras por el micrófono del periodista Álvaro Colmenero: “Eres mi mejor medicina, hijo. Mi mejor medicina”.

    Con esta victoria, Hecher Sosa demuestra que ya no necesita más pruebas. La UFC, la mayor liga de las artes marciales mixtas del planeta, lo espera. Lanzarote tiene en él a un competidor de élite, forjado entre sacrificio, talento y amor por los suyos.

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