El surf, salpicado por la guerra: cancelado el Pro Junior de Donosti
La organización rechazó la participación de atletas de Israel
La World Surf League (WSL) ha anunciado oficialmente la cancelación del Basque Country Junior Pro, prueba puntuable del circuito europeo júnior que iba a celebrarse del 6 al 8 de junio en la playa de La Zurriola (San Sebastián). La decisión ha sido tomada a escasos días del inicio del evento, tras la retirada del respaldo por parte del club local Groseko Indarra Surf Taldea y la convocatoria de protestas contra la participación de surfistas de Israel.
Esta medida ha afectado directamente a varios surfistas lanzaroteños que ya se encontraban en Donosti para competir. Entre ellos, destacan los hermanos Dylan y Connor Donegan, que tuvieron que interrumpir su pretemporada en Indonesia para estar presentes en la cita. También el joven surfista Saion Borelli, quien denunció en redes sociales que ya había facturado su equipaje en el aeropuerto cuando recibió la noticia de la cancelación.
La WSL justificó la decisión señalando que la situación vulneraba disposiciones clave de su reglamento, como la prohibición de cualquier forma de discriminación en la inscripción y clasificación de atletas. Además, la organización explicó que, tras perder el respaldo técnico del club local y municipal, no podía garantizar los niveles mínimos de seguridad requeridos para celebrar un evento oficial.
El club Groseko Indarra, que inicialmente iba a colaborar con la organización proporcionando infraestructura técnica, comunicó públicamente su negativa a participar como gesto de protesta por la presencia de deportistas israelíes. En un comunicado, expresó su rechazo al "genocidio que sufre el pueblo palestino" y reclamó una postura más firme por parte de las organizaciones deportivas internacionales, similares a las sanciones impuestas a Rusia por la guerra en Ucrania.
La cancelación ha sido calificada como un hecho inédito en el circuito Junior de la WSL, al producirse apenas 48 horas antes del inicio de la competición. La organización local estudia ahora posibles alternativas para celebrar el evento de forma independiente, aunque sin el reconocimiento oficial del circuito internacional.
Desde Lanzarote, la noticia ha causado indignación entre deportistas, familias y entrenadores, que lamentan tanto las implicaciones deportivas como los costes logísticos de una decisión inesperada y ajena a los propios atletas. A la espera de una posible reprogramación o compensación por parte de la organización, los surfistas de la isla ya piensan en sus próximos objetivos en el calendario internacional.
