El equipo español femenino encantado con el altísimo nivel que hay en Lanzarote
Consideran a la isla como “un paraíso” por sus condiciones climatológicas y por ser parada obligatoria para la élite deportiva
Marina Rubicón está siendo el epicentro de la vela, a los iQFoil Games de enero se le suma la II Lanzarote International Regatta con la que los participantes aseguran estar encantados de competir en la isla en esta nueva clase olímpica que debutará en las próximas olimpiadas de París 2024. Mateo Sanz, entrenador del equipo español femenino de iQFoil, dejó claro que “el nivel internacional de la Lanzarote International Regatta es altísimo, aunque faltan quizás los asiáticos, pero tenemos incluso regatistas olímpicos de Sudamérica”.
Más de 30 países representados en una competición que se fragua en las aguas de Marina Rubicón donde se enfrentan y se ven las caras la élite deportiva. No es para menos, se trata de la primera prueba del mundo del calendario de clases olímpicas 49er, 49erFX, ILCA 6, ILCa 7 y el iQFoil, motivo por el cual el propio Sanz asegura que “nos viene muy bien este inicio de temporada para preparar las siguientes competiciones y medirnos con las futuras rivales”.
El equipo olímpico femenino español está dejando más que buenas sensaciones. A la experiencia y el alto nivel de Pilar Lamadrid, quien fuera ganadora de los recientes iQGames de Lanzarote; y al gran trabajo de Nicole Van Der Velden, con reseñables resultados en competición europea y en el Mundial; se le suma el indiscutible talento de Blanca Manchón, que está incorporándose después de haber participado en los Juegos Olímpicos de Tokio al cambiar la clase de RS:X por la de Foil; además de la brillantez emergente de Andrea Torres, la integrante más joven cuyo potencial promete un gran presente y futuro. Gran actuación del equipo que se debe al gran trabajo que están realizando estos días en Lanzarote.
Lamadrid ya ha declarado que “es un gusto poder venir a entrenar a las Islas Canarias y hacer de Lanzarote nuestra base de invierno”, sobre todo teniendo en cuenta esa meta de París 2024, reconociendo que la isla sirve como centro de entrenamiento perfecto al contar con las condiciones óptimas para poder prepararse con la mayor exigencia posible, refiriéndose no solo a la meteorología, sino también a que Lanzarote está sirviendo para reencontrarse los mejores en iQFoil, por lo que supone unas regatas del más alto nivel. “Cada vez que elegimos un sitio o un centro de entrenamiento, buscamos precisamente que haya otros equipos para navegar todos juntos, pero también regatas como estas, por las que me gustaría agradecer a la organización, ya que nos sirven como parciales para prepararnos para el examen final”, señala la regatista española.
Blanca Manchón da buena fe de ello ya que la sevillana es asidua en las agua del archipiélago, mientras que para Pilar Lamadrid Lanzarote fue todo un descubrimiento cuando en 2018 visitó la isla cuando competía en RS:X, “pasé unos meses increíbles de invierno, ya que en la península no puedes echar tantas horas porque hace más frío”, admite Lamadrid al mismo tiempo que aclara que en la temporada de invierno es posible entrenar gracias al trabajo de la Federación Española de Vela, porque “monta toda esta expedición para que nosotras solo tengamos que coger un vuelo a las islas, sin tener que trasladarnos con todo el material”. Traslado hasta Lanzarote que ella misma cataloga como “un paraíso” al haber siempre viento y sol, “sobre todo porque nuestro trabajo es meternos al agua sin importar el tiempo, por lo que aquí nos animamos más y podemos entrenar el doble de horas”, concluye Lamadrid.