CB Conejero y NABA firman un convenio de colaboración
Una quincena de jugadores de la academia irlandesa viajarán la próxima temporada hasta la isla
A pesar de lo difícil que está siendo la temporada para los clubes deportivos en plena pandemia y con la imposibilidad de que las categorías base estén a pleno rendimiento, el Club Baloncesto Conejero sigue trabajando en fórmulas que permitan a las familias de sus jugadores sobrellevar la situación, ligando las soluciones al baloncesto.
La entidad que preside Iván Fernández ha llegado a un acuerdo con la North Atlantic Basketball Academy (NABA) de Irlanda por la cual, la entidad afincada en Dublín, se establecerá en la isla la próxima campaña con una quincena de jugadores de 17 a 19 años, que llegarán gracias a una beca que les permitirá participar de su programa de mejora deportiva con un técnico de la entidad irlandesa.
A cambio, el Club Baloncesto Conejero ofrecerá la posibilidad de que familias de su club puedan alojar a los jugadores en régimen de alojamiento y comidas, sufragado por la North Atlantic Basketball Academy, con un máximo de 2 jugadores por casa que podrían compartir habitación. El acuerdo supone una inyección importante de dinero para las familias arrecifeñas, aunque otra de las posibilidades es que, combinado con la acogida de un jugador de la NABA, se haga un intercambio y el jugador lanzaroteño tenga la posibilidad de realizar un año de estudios en Irlanda, mejorando el idioma inglés.
Esto no significa que la North Atlantic Basketball Academy vaya a sacar equipo de baloncesto en Lanzarote, ya que ellos se encuentran jugando la European Youth Basketball League, donde militan los jóvenes valores del baloncesto europeo, ni que el CB Conejero vaya a darle cabida a estos jugadores en su base, aunque una vez estos jugadores lleguen a la edad senior, si el club lanzaroteño considera que pueden aportar al equipo de la Liga EBA serían cedidos por la entidad irlandesa.
Quien si se incorporará a la estructura del CB Conejero será el entrenador que venga por parte de academia irlandesa, que formará también a los jugadores del club insular en categorías base, pudiendo algunos jugadores lanzaroteños pasar al grupo de tecnificación para mejorar su calidad, si así lo consideraran ambas entidades, pensando en la mejora del deportista.
La North Atlantic Basketball Academy planea también desplazar el campus de verano que organiza anualmente en Dublin a Lanzarote por el atractivo climatológico de la isla. En este campus un total de 50 jugadores semi profesionales intentan crecer y dar su último paso antes de llegar a profesionales. Junto a ellos, una veintena de ojeadores de todo el mundo, compartirán experiencias durante dos semanas y quedándose en la capital de la isla, que recibirá una fuerte inyección económica en sus servicios alojativos, pero también un salto para meterse en el escaparate europeo del baloncesto.
Por otra parte, la entidad naranja recuerda que decidió antes del comienzo de la temporada eximir del pago de cuotas a los jugadores para la presente temporada, asumiendo que la Federación Canaria de Baloncesto no iba a reducir sus cuotas de licencia ni inscripción y el seguro deportivo de los jugadores y entrenadores sigue teniendo un coste anual de 55 euros. El club de Arrecife entiende que la situación económica actual es muy complicada para todos y debe hacer un esfuerzo para que los chicos puedan seguir haciendo deporte y disfrutando del baloncesto, aunque ello suponga una dificultad más para mantener la infraestructura.
Por último, el club espera que se pueda retomar pronto la competición de la categoría cadete y junior, que son las dos únicas que consiguieron arrancar aunque ahora se encuentren paradas provisionalmente y que posteriormente puedan tener actividad otras categorías del club, en una temporada que previsiblemente se alargará hasta el mes de julio y donde, salvo que Sanidad cambie la normativa, se exige que los jugadores participen en partidos y entrenamientos con mascarilla quirúrgica de manera obligatoria.
El CB Conejero sigue pensando en el futuro de sus jugadores, en el futuro de la base y dándoles la posibilidad de tener un crecimiento personal gracias al baloncesto.